Se busca acompañar al cliente en su proceso de conseguir una mayor autenticidad, trayendo procesos inconclusos del pasado al presente y así trabajarlos desde el aquí y el ahora, poniendo conciencia en dónde ponemos atención. La memoria no es inequívoca, al contrario, se trata de un proceso en el cual recordamos hechos aislados y lo que pasa entre esos hechos es una reconstrucción. Las sensaciones quedan sin embargo grabadas, y si las traemos al presente podemos trabajar esas sensaciones al igual que si estuviesen pasando ahora mismo. Lo pasado pasado está, no podemos cambiarlo, sí que podemos trabajar en cambio con lo que aún pervive en nosotros, con esas gestalts inconclusas, que piden una y otra vez buscando situaciones en el presente que nos ayuden a sanar, ser completadas y así poder liberar aquello que había quedado escondido y que necesitaba ser oído y visto.